La importancia de la certificación vegana en perfumería y cosmética

¿Piensas que con leer la lista de ingredientes de los productos que consumes es suficiente para saber si son veganos? Por desgracia, no lo es. En el etiquetado de perfumes y cosméticos encontramos información que no suele aclarar si estamos ante composiciones que realmente lo sean.

Entonces… ¿cómo podemos confiar en que lo que estamos comprando es totalmente vegano? ¿cómo garantizamos que el producto sigue esta filosofía? ¡En este artículo te lo explicamos todo!

Ingredientes que deben ser declarados y cuáles no.

Cada producto cosmético debe ir acompañado de la información sobre su composición, ya sea en una etiqueta, en su caja o en un prospecto. Esto significa que debe contar con un INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos) en el que se enumeren todos los ingredientes. Este listado estandarizado permite conocer de qué está hecho un cosmético en cualquier punto del planeta.

En el caso de los perfumes, seguramente sepas que se componen principalmente de tres ingredientes: alcohol, agua y la fragancia. Pero ¿qué sabemos de este último? Aparece en el INCI como Parfum (fragrance) y no necesita ser desglosado en su totalidad, entre otras razones para garantizar la confidencialidad de su fórmula. Además, en muchos casos puede estar compuesto por más de 30 ingredientes por lo que se necesitaría un espacio demasiado amplio para detallarlos todos. Legalmente, es suficiente con añadir qué alérgenos incluye, siempre y cuando su concentración sea superior al 0,001%, o superior al 0,01% si el cosmético necesita ser aclarado o enjuagado.  

Por lo tanto, leer este apartado no basta para saber si el perfume contiene ingredientes de origen animal, como la miel, el castoreum o la civeta, que se suelen usar para aportar intensidad al perfume y que, lamentablemente, siguen estando permitidos en perfumería.

Otra cosa importante es que una misma materia prima puede tener diversos orígenes: sintético, vegetal o animal. Además, puede tener una procedencia biotecnológica, es decir, que se le hayan añadido intencionadamente bacterias, hongos, algas o cultivos celulares para su producción y/o modificación.  A continuación, te dejamos algunos casos:

• Hyaluronic acid, puede ser de origen animal o biotecnológico.

• Retinol puede ser de origen animal, vegetal o biotecnológico.

• Cetyl alcohol puede ser de origen animal, vegetal o sintético.

Fuente de los casos: UVE (Unión Vegetariana Española)

En conclusión, el INCI no aporta información sobre el origen de todos los ingredientes que componen un perfume , por lo que la mejor forma de saber que un producto es 100% vegano es a través de su certificación. 

La certificación vegana V-Label: un sello de calidad.

La V-Label es un sello  que cuenta criterios propios para determinar si un producto o servicio es vegano. Este sello, reconocido internacionalmente, promueve la transparencia y claridad en el etiquetado.

Su equipo de profesionales realiza rigurosos exámenes para determinar si un producto considerado como vegano, realmente lo es. El tiempo habitual que suele llevar a una marca conseguir la certificación V-Label es de 4 semanas aproximadamente, aunque puede variar según la complejidad y el número de productos.

Lo primero que hace es analizar todas las materias primas que forman parte de un producto. Además, examina si se han usado sustancias de origen animal como sustrato de fermentación o como medio de cultivo para su producción.

Una vez confirmado que todos los ingredientes son aptos, se revisa que no exista contaminación cruzada durante todas las fases del proceso de producción. Para ello se lleva a cabo una auditoría externa de las instalaciones, concretamente de todas las zonas por las que pasa el producto. Además, el equipo encargado realiza un ejemplo de trazabilidad aleatorio de una de las fragancias para asegurar que todo el proceso funciona  correctamente.

Por supuesto, cualquier cambio en la fórmula o en los procesos de producción de perfumes y cosméticos que lleven el sello V-Label, se comunican a los miembros del equipo responsables de la gestión de calidad. Una vez que la empresa ha declarado los cambios pertinentes, se lleva a cabo una revisión documental de la nueva formulación.

En definitiva, V-Label es un sello de calidad que ayuda a los consumidores de una manera sencilla y fiable a elegir productos conformes a su filosofía. Por eso en Delisea… ¡Estamos muy contentos de ser la primera marca de perfumería vegana española certificada!

Cosméticos “veganos” no certificados.  

Son muchas las empresas que utilizan sus propios sellos para confirmar que sus productos son veganos. Esto quiere decir que la empresa decide por sí misma cuales son los criterios para determinar si lo es o no, sin que exista un organismo independiente que acredite la fiabilidad de este sello. Esto, además, puede dar lugar a contradicciones con otras empresas que tengan diferentes criterios.

La falta de conocimiento sobre estas cuestiones puede confundir al consumidor, llegando a entender que tras este sello se esconden las garantías de que un producto es vegano.

A continuación, vamos a explicar un ejemplo de la Unión Vegetariana Española (UVE). Se trata de un champú revitalizante que había sido etiquetado como vegano. A simple vista, y teniendo en cuenta su composición cualitativa, podía parecerlo; pero veremos a continuación lo que pasó cuando intentó certificarse.

Echemos primero un vistazo a su listado de ingredientes:

• AQUA
• SODIUM LAURETH SULFATE*
• COCAMIDOPROPYL BETAINE
• COCO-GLUCOSIDE*
• PARFUM*
• GLYCERIN*
• LECITHIN*
• TRIETHANOLAMINE
• CITRIC ACID*
• ARGANIA SPINOSA KERNEL OIL

*Los ingredientes que aparecen en negrita son catalogados como críticos bajo los criterios V-Label, su origen es dudoso pudiendo ser animal entre otros y durante los procesos de desarrollo pueden emplearse preparaciones enzimáticos o minerales de origen animal.

Tras finalizar el estudio de viabilidad de este producto, V-Label concluyó que el producto no podía ser certificado, pues contenía dos ingredientes NO APTOS.

En primer lugar, tras revisar la documentación aportada se observó que las lecitinas empleadas en la elaboración de este producto tenían su origen en la yema de huevo. Además, en referencia al ingrediente coco-glucoside se empleaban amilasas de origen animal para la producción de la glucosa.

Por tanto, gracias al estudio de viabilidad para su certificación se comprobó que un producto aparentemente vegano, no lo era.

Nosotros lo tenemos claro: la mejor manera de confirmar que un producto es vegano es… ¡que esté certificado! El consumidor vegano busca transparencia a la hora de localizar de forma sencilla y rápida productos para su cesta de la compra. Poder identificar perfumes libres de materias primas de origen animal o que testen en animales es vital para seguir la filosofía.

Si tienes cualquier duda sobre el proceso de certificación vegana de nuestros perfumes, ¡no dudes en preguntarnos!